Luego de lo que fue el desencadenante de la caída en la Copa Argentina -con la salida de Nelson Vivas como entrenador-, Estudiantes debe levantar rápidamente la cabeza y este sábado es la gran oportunidad. En el Centenario de Quilmes y bajo el arbitraje de Andres Merlos, el Pincha estará cara a cara con Belgrano de Córdoba.
Con un nuevo entrenador, Leandro Benítez de manera interina hasta que se anuncie oficialmente el sucesor de Vivas, Estudiantes tiene la necesidad y obligación de dar vuelta la página. Con dos derrotas en fila el equipo se desmoronó como un castillo de arena. Por ende las obligaciones apuntan hacia un mismo sentido: la victoria.
Sin dudas que un triunfo no sólo calmará las aguas, luego de las turbulencias de los últimos días, sino que le volverá a abrir la chance de pelear por un puesto para la Copa Libertadores del año próximo. Que hayan ganando Independiente, el pendiente con Defensa, y Colón a San Lorenzo no hace más que incrementar la necesidad de sumar de a tres para no alejarse del pelotón.
Para esta tarde, el Chino Benítez no pondrá contar con Ascacibar ni Damonte, pero sí recupera a Lucas Viatri para armar la línea de ataque. Esto no es todo, el Chapu Braña será titular y conformará el doble cinco con Bautista Cascini.
Las mayores dudas para el joven entrenador pasan por el sector izquierdo en donde Dubarbieri y Diarte pelean por estar en la oncena titular, aunque no es descabellado imaginarse a ambos en el equipo.
Sin pensar en lo que pueda desplegar Belgrano, elenco que está de capa caída en este semestre, Estudiantes debe dar vuelta la página, debe volver a la senda victoriosa, pensar que la oportunidad de acceder a la Libertadores del 2018 sólo depende de sí mismo.