Luego de lo que sucedió hace una semana en Victoria, Estudiantes debe y necesitar ganar. Y para alcanzar esa premisa tendrá que sortear un compromiso por demás exigente. Desde las 17.00 jugará en la cancha de Quilmes ante Atlético Tucumán. Silvio Trucco será quien impartirá justicia.
La dificultad del pleito pasa por sobre todas las cosas porque el Decano es uno de los equipos que jugará la final de la Copa Argentina. Si bien es cierto además que dicho certamen es el objetivo del elenco tucumano, la necesidad de engrosar su promedio ya se transformó en un eje esencial en la presente campana y por esa razón es que el Ruso Zielinski no se guarda nada para esta tarde.
La necesidad de ganar, de levantar la cabeza va de la mano del mejoramiento colectivo o de volver a ser ese equipo confiable que le ganó a Argentinos Juniors, que tan buena producción tuvo frente a Banfield y que en el inicio del ciclo de Lucas Bernardi goleó con mucha autoridad a Temperley a domicilio. Y para recuperar "lo perdido" hace una semana en Victoria, el entrenador albirrojo introduce cambios, algunos obligados por lesión como el caso del regreso de Leandro Desábato por Sebastian Dubarbier. Con el Chavo en la once titular, Gastón Campi se "correrá" unos metros a su izquierda para jugar como lateral izquierdo. Claro con que esta variante el equipo, en cierta parte, no tendrá esa profundidad que logra cuando el ex marcador de punta de Almería.
Otro de los que está en la consideración del técnico es Mariano Pavone. El Tanque es fija que va de "nueve" y que las alternativas para acompañarlos en la línea ofensiva con Tití Rodríguez y una de las apuestas para esta ocasión de parte de Bernardi es el juvenil punta categoría 97 Carlo Lattanzio, quien ya debutó en la primera pincha con Gabriel Milito en el año 2015. A su vez el centro del campo volverá a contar con el binomio conformado por Damonte-Gómez; mientras que Fernando Zuqui una vez más tendrá la misión de ser la rueda de auxilio del citado tandem y al mismo tiempo sumarse al frente ofensivo del equipo.
Entre nombres y movimientos de piezas, Estudiantes como quedó expresado debe ganar, debe levantar cabeza, debe volver a sentirse confiable y agresivo en ataque que el el cierre del año llegue de la mejor manera considerando que a partir del 2018 el plantel debe afrontar en el amanecer del próximo año la Copa Libertadores y la segunda mitad de la actual Superliga.