Llegar a la élite del fútbol mundial tiene sus beneficios económicos y para la gran mayoría de los jugadores parece complejo abstraerse de los lujos materiales parece una misión imposible. Pero para Santiago Ascacibar, a pesar de ser parte de la Bundesliga alemana, su Gol color rojo sigue siendo su transporte. Así, muestra la humildad con la que se maneja el ex 5 del Club.
Este mensaje de humildad fue el primero que volcó en hechos. Los otros consejos, el Ruso, los dio desde su experiencia de haber estado en las juveniles, dejar la escuela, retomar sus estudios en el Bachillerato exclusivo para futbolistas y después -al mismo tiempo de llegar a Primera- anotarse en la carrera de antropología de la Universidad Nacional de La Plata.
Hoy, su anhelo es conocer en un futuro sobre las comunidades humanas, su aspecto físico y demás. Más allá de cumplir su sueño de vestir la camiseta Argentina y continuar progresando en su carrera como jugador. Un ejemplo más del Ruso que supo conocer, aprender desde adentro la forma de ser de Estudiantes de La Plata y que hoy lo transmite a las futuras generaciones.