El hockey continúa con sus entrenamientos y charlas on line, y en esta oportunidad la coordinación general apuntó a un puesto casi trascendental en el juego: el arquero. Y para que los goleros de todas las categorías de damas y caballeros sigan conociendo más de esa posición en la cancha, es que se efectuó una charla-conferencia con Emiliano Bosso, "guardameta" de la Selección Nacional de varones.
Emiliano se inició como jugador de hockey en su Mendoza natal, más precisamente en el club UNCuyo, y luego armó su bolso para formar parte del club GEBA. "En mi formación como arquero fue clave haber tenido en un entrenador como Guillermo Weertz que fue arquero y me explicó de qué se trataba el puesto. Eso me ayudó mucho a tomar mi decisión. Fui arquero desde el primer día porque tuve una persona en mi club que me enseñó que existía la posición".
"Hoy el gran problema de la falta de arqueros es que los entrenadores que reciben a los chicos o chicas fueron jugadores de campo y por ende, como no son especialistas en la materia, en lo último que se piensa es en cubrir el arco. Esto hay que tratar de modificarlo", sostuvo el mendocino.
ENTRENADORES DE ARQUEROS
Bosso se refirió a la labor de los entrenadores de arqueros que deben contar todos los clubes de hockey (hoy Estudiantes tiene en su staff a Pablo Hernández, quien fue golero del primer equipo y ya suma varias temporadas trabajando con las y los arqueros pinchas de todas las categorías). "Hay varias cosas que se deben mejorar en el corto y largo plazo. Un primer error es que, como dije, los entrenadores son jugadores de campo y no saben del puesto. Otro punto es que deben contar con conocimientos del puesto, porque se sabe que el arquero es la última persona en impedir el gol".
"Mayormente el entrenador busca capacitarse sobre jugadores y no en arqueros. Se perfeccionan en quites, bloqueos, cortos, etc. Hay cuestiones generales del arquero de hockey que sabemos todos, pero yo pregunto cuánto tiempo invertimos en enseñarle cosas a los arqueros que no sean básicas. No se investiga, no se buscan otras opiniones. Es algo que sucede en la mayoría de los clubes, hay que incentivar a los entrenadores que no fueron arqueros a que pueden mejorar el entrenamiento del arquero," enfatizó.
EL ENTRENAMIENTO
Otro de los aspectos en que se enfocó la conferencia, fue en la preparación del arquero, y principalmente, en evitar en que sus actividades sean en solitario. "Durante el año, con millones de partidos, no le damos una corrección al arquero y con esto, cómo queremos lograr que continúe en ese puesto. Al arquero hay que hacerlo participar de todos los ejercicios, charlas técnicas y demás. Soy de la idea que el arquero tiene que hacer físico a la par del resto. No digo que corra 25 kilómetros, pero sí tiene que trabajar un poco de todo, es decir la técnica, la velocidad, la resistencia. El arquero debe y tiene que ser más rápido que el delantero en una bocha dividida y esto se logra entrenando la velocidad, técnica, agilidad, coordinación, con el resto del grupo".
"Hay que adaptar los entrenamientos a situaciones de partidos con el fin de que el arquero se sienta partícipe de la práctica. Hay que evitar excluirlo todo el tiempo, debe entrenar en la mayoría de las acciones con el resto del equipo porque constantemente se está aprendiendo".
UN ALIADO DEL DT Y LOS PENALES
"El arquero debe saber todo sobre el equipo, o mejor dicho, sobre acciones de juego. Y esto se logra hablando con el entrenador para saber lo que pretende del once en la cancha", puntualizó en referencia al rol que tiene el golero en el rectángulo de juego.
"Esas charlas también hay que llevarlas a cabo con los defensores por si hay una acción de dos contra uno, para resolver que medida tomar. Es importante que el arquero manifieste su punto de vista acerca de una acción de juego porque la óptica del que está en la cancha, y en el arco, es diferente a la que tiene el que está afuera. Hay que consensuar entre todos, defensores, entrenadores".
"El arquero debe ser un aliado del entrenador por la visión que tiene del juego. No es un entrenador más, pero sí aliado, porque el arquero puede resolver cosas en milésimas de segundos".
El último punto de la charla se focalizó en la ejecución de los penales y todo lo que conlleva al arquero en esa situación de juego. "Tengo mi punto de vista. No creo que sea la verdad absoluta, pero desde mi óptica el penal debe vivirse desde el momento que el árbitro lo sanciona. En ese preciso instante yo empiezo a jugar mi duelo personal con el atacante. Internamente puedo tener miedo, pero por fuera busco mirar quien tira el penal, si dudan, etc. Las presiones son mutuas, pero el arquero debe empezar a leer al delantero o ejecutador para demostrarle que se está seguro, y confiado en sí mismo".
"Mientras más mostremos nuestra presencia debajo de los tres palos, mejor. Me gusta mirar fijo al tirador. De cada cosa trato de sacar algo...Hay que saber manejar el tiempo, para entrar cómodo en el arco, sentirse seguro... nunca hay que mirar al palo, siempre la bocha".