¿Quién puede en el fútbol argentino tocar el cielo con las manos en tan solo cuatro meses? ¿Quién se puede consagrar campeón de un torneo (extenso como lo fue el Metro de 1982) y en solo 120 días volver a lograr un título? ¿Quién sino Estudiantes? ¿Por qué? Porque entre febrero y junio de 1983 fue bicampeón, dejando en el camino al mismo rival: Independiente.
Hoy se cumplen 37 años que aquella maravillosa conquista del elenco que dirigía Eduardo Luján Manera (tomó la posta tras la partida de Carlos Bilardo a la Selección Nacional) en el viejo estadio del club de Avellaneda.
La doble competencia en el año 1983 no fue excusa, El Torneo Nacional se tiñó de rojo y blanco como había sucedido con el Metropolitano de 1982 (el cual culminó en febrero de 1983).
Con la Copa Libertadores de por medio, Estudiantes afrontó el Nacional con equipos alternativos, integrados por jugadores surgidos del semillero como Oscar Craviotto, Gustavo Rezza, Claudio Jeannoteguy, Christian Guaita, Alfredo Llane o Adriano Tomás Custodio Méndez, sumado a un joven Luis Islas que llegó al club proveniente de Chacarita.
Luego de ganar con comodidad el grupo H, donde se enfrentó con Unión, Racing de Córdoba y Unión San Vicente de Córdoba; luego se cruzó con Vélez, e Instituto para acceder a los octavos de final. Allí eliminó a Ferro (1-0 y 2-2) a pesar que la Libertadores había pasado a ser prioridad. Manera optó, en aquel cruce con el Verdolaga, poner en cancha formaciones alternativas y el equipo respondió con creces. Ya en cuartos eliminó a Racing (3-1 y 1-2) y se metió en semifinales donde el rival fue Temperley.
La eliminación con el Gasolero fue muy exigente. El primer chico finalizó 1-1 en nuestra ciudad y en la revancha que se jugó en Banfield, se definió 3-1 para Estudiantes, en tiempo suplementario.
El Pincha quedó otra vez a tiro de un campeonato y otra vez con Independiente como rival. A diferencia del Metro, que tuvo a Estudiantes en lo más alto de la tabla y al Rojo siempre pisándole los talones, ahora había que definir cara a cara con los de Avellaneda, que había despachado a Argentinos Juniors.
El primer duelo de la final del Nacional se jugó en 57 y 1, el 4 de junio. Estudiantes ganó 2-0 con los goles de Guillermo Trama y Hugo Gottardi. Esa noche no sólo sirvió para meterse medio campeonato en el bolsillo sino para despedir a uno de los grandes goleadores e ídolos de nuestro club: Hugo Gottardi, quien fue transferido a Independiente Santa Fe de Colombia.
La revancha se disputó en el viejo estadio del Rojo de Avellaneda y Estudiantes pudo coronarse campeón por su tremenda victoria en La Plata. El gol de Guillermo Trama, en los minutos finales del primer tiempo selló el título para el conjunto de Eduardo Manera. Esa noche del 10 de junio de 1983 Estudiantes ganó 2-1 y volvió a gritar campeón, como lo había hecho cuatro meses atrás en Córdoba marcando un hecho único en el fútbol argentino.
Honor a todo el plantel dirigido por el recordado Eduardo Luján Manera al cumplirse 37 años del Torneo Nacional. Los jugadores que le dieron una nueva estrella a la institución fueron: Carlos Héctor Bertero, Luis Alberto Islas, Julián Camino, José Luis Brown, Rubén Agüero, Abel Ernesto Herrera, José Daniel Ponce, Miguel Angel Russo, Alejandro Sabella, Marcelo Trobbiani, Hugo Ernesto Gottardi, Guillermo Trama, Claudio Gugnali, Alberto Benitez, Hugo Tévez, Sergio García, Claudio Jeannoteguy, Néstor Craviotto, Alejandro Astudillo, Adriano Tomás Custodio Méndez, Gustavo Rezza, Daniel Rodríguez, Christian Guaita, Juan Carlos Benítez, José María Vieta, Alfredo Llane y Luis Marcelo Garro.