"Esto es partido a partido" ha dicho en reiteradas ocasiones el entrenador de Estudiantes, Eduardo Domínguez. Y en este caso la decisión está clara: Corinthians. Pero previo a la revancha con el elenco paulista, el Pincha juega hoy con Unión de Santa Fe, desde las 16.30 en casa, por la segunda jornada de la Copa de LPF.
Los objetivos son claros aunque nadie le puede quitar el ojo a esta Copa. Es que hay mucho en juego, sobre todo las clasificaciones a los torneos internacionales del 2024, y Estudiantes lo sabe, aun teniendo tan cerca el cruce con Corinthians. Ante la importancia de cada cotejo, el cuerpo técnico mete mano en la plantilla, hace descansar a varios de los habituales titulares y a otros no, sabiendo que no puede regalar nada en este primero cotejo de la Copa en UNO.
Está claro que para Estudiantes es una premisa a solucionar esto de jugar ante un rival en formación, como es Unión. Y esas soluciones además pasan porque en la zona media no estarán Rodríguez, Rollheiser, Sosa; en ataque Carrillo tampoco, y en el fondo la dupla de centrales, Lollo y Núñez; más Leo Godoy también descansan. Entonces el "nuevo equipo" tendrá que responder (y con pocas horas de entrenamiento) ante las exigencias y ante las obligaciones que conllevan por lógica jugar de local. Y obviamente que esas soluciones las deben dar jugadores que ya tienen muchos partidos en el carretel caso Zapiola, Núñez, Mancuso, Ascacibar, Zuqui, Boselli, Méndez; y otros que a lo largo de esta temporada han tenido participación en la oncena titular por situaciones puntuales como Guasone, Muñoz, Nicolás Fernández, Palavecino, Verón.
Lo concreto y más allá de los nombres propios por lo que se incline Domínguez en lo que a la formación se refiere, es que el equipo debe responder ante las necesidades que esgrime este partido con Unión, que viene de sumar un buen punto en Santa Fe ante Racing (próximo rival de Estudiantes), a quien vale aclararlo lo tuvo a mal traer.
Estudiantes tiene que ganar, porque por un lado debe olvidarse de lo que sucedió en Córdoba con Belgrano y obviamente de la derrota del pasado martes en Brasil. Porque ganar aumenta el autoestima para lo que se viene y por que, como quedó dicho, en este segundo campeonato hay muchas cosas en juego, es un certamen corto donde, si la racha es positiva se puede alcanzar un puesto de semifinales, lo que va de la mano con la clasificación a las copas internacionales del año venidero.