Estudiantes que aún no ganó en la Copa de la Liga, pero que llega con una sonrisa a flor de piel por su clasificación a los cuartos de final de la Copa Argentina, afronta este viernes un nuevo compromiso como visitante y en un terreno que es casi inexpugnable. Desde las 17.00 se mide con Tigre en su casa. Para este compromiso Eduardo Domínguez no podrá contar, entre tantas ausencias por lesión, con dos piezas claves para el ataque: Mauro Boselli y Guido Carrillo.
Jugar y salir sonriendo de la casa del Matador de Victoria es una verdadera cuenta pendiente. Estudiantes no derrota a Tigre como visitante desde el 2016 (3-0 con goles de Bailone, Damonte y Lucas Rodríguez). Luego todos fueron sin sabores, con el detalle que el elenco tigrense jugó en la B Nacional en el 2019.
Pero las estadísticas son números, son apuntes que muchas veces son relevantes y tienen su importancia o preponderancia; y en otras ocasiones no. En este caso el equipo de Eduardo Domínguez no debe pensar en ello, porque así lo hizo cuando le ganó a Independiente en Avellaneda o a Boca en la Bombonera en el campeonato anterior. Lo que sí debe considerarse para este partido es que la ofensiva no es la misma de otros encuentros y que el uruguayo Méndez será el faro de la oncena que plante en cancha el entrenador pincha. Si algún condimento más le falta a este partido, es que Tigre viene de ganarle a Boca como visitante y el de hoy será el debut de Lucas Pusineri en el estadio Jose Dellagiovanna; y por ende su formación apuntará a repetir lo hecho frente al xeneize.
Y si de jugar se trata, claramente que la ausencia de Boselli y Carrillo es un problema a resolver por Estudiantes. Primero por lo ya dicho, que sólo Méndez es quien se moverá como delantero natural (el otro punta citado el juvenil 2003 Martiniano Moreno) más allá de que forme dupla con Rollheiser, Sosa o quien decida Domínguez; y en segundo lugar porque los delanteros en cuestión en el juego áereo son temibles y por consiguiente no se debe abusar de los centros llovidos al área, ya que esto agigantaría el rendimiento de los defensores de Tigre. Por ende, el juego tendrá que ser por el piso, con Sosa como abanderado, donde la zona media deberá superar a lo que proponga Tigre y para al mismo tiempo no sufrir como lo sucedió en el primer tiempo con Racing la fecha anterior.
Estudiantes, con la sonrisa en su cara por seguir luchando por la Copa Argentina, se presenta en la casa de Tigre. Un partido muy complejo, pero donde el equipo debe mostrar sus atributos y donde las necesidades por volver al triunfo (aun no ganó en esta Copa de la Liga) lo lleven a tener una producción de alto vuelo, algo que los pupilos de Domínguez sabe de que se trata.
