Cuando se habla de hazañas, de hechos épicos en la historia del club hay un partido y un resultado que inmediatamente aflora: El empate 3-3 frente a Gremio por la Copa Libertadores 1983. Este sábado se cumplen 34 años de ese maravillosa gesta del equipo de Eduardo Luján Manera que con tan sólo siete jugadores alcanzó esa igualdad con quien a la postre sería el campeón de América.
Con un estadio Jorge Luis Hirschi desbordado de gente, que soportaron el frío intenso de aquel 8 de julio de 1983, Estudiantes se jugaba ante Gremio la gran chance de acceder a la ronda final de la Libertadores de dicho año.
El partido fue extraño desde el mismo comienzo del juego, donde el árbitro uruguayo Da Rosa sacó una amarilla previo al pitazo inicial y luego expulsó sin argumentos a Marcelo Trobbiani y José Daniel Ponce. Minutos más tarde y ya con nueve jugadores, Sergio Gurrieri apareció por la banda izquierda del área chica y empujó la pelota al gol.
Gremio logró el empate 1-1 minutos antes de finalizar la primera mitad. El comienzo del segundo tiempo fue peor que el inicio del pleito, porque a los 17 minutos perdía 3-1 y, el "sensible" juez charrúa expulsó primero a Julián Camino y luego a Hugo Tévez.
El sueño de seguir en la Copa se iba esfumando, hasta que la mística dijo presente en 1 y 57. Con siete jugadores Estudiantes acorraló a Gremio. Sabella, Russo y Agüero encabezaron las ofensivas y fue el Chango Gurrieri, quien tras un centro de Guillermo Trama, puso el 2-3. Minutos más tarde Miguel Russo tomó un rebote en la puerta del área y sacó un certero que marcó el 3-3 e hizo delirar a las más de 30 mil almas que coparon el estadio pincha.
Ese 3-3 fue héroico, épico, algo que jamás otro equipo pudo igualar. Si bien Estudiantes luego quedó eliminado de la final (Gremio finalmente se quedó con el título), el empate con los brasileños y con sólo siete jugadores en la cancha quedará marcada a fuego no solo en los hinchas albirrojos, sino en todos los fanáticos de la Copa Libertadores.
Remontadas como esas se recuerdan pocas en el mundo del fútbol y, como no podía de ser otra manera, la logró Estudiantes.