Gastón Fernández tuvo su homenaje y despedida en UNO, junto a sus compañeros del Pincha con los que conquistó la Libertadores 2009 y el Apertura 2010. En una noche soñada, la Gata dijo adiós. "Si bien me retiré hace casi dos años, sentía que necesitaba el partido que jugamos, para cerrar mi carrera. Soy un agradecido a Estudiantes y a la gente".
"Siempre fui muy impulsivo y no me arrepiento de las decisiones que tomo. El retiro era algo que lo estaba analizando y sabía hasta donde iba a llegar mi carrera. Con la pandemia se adelantó la decisión y fue de un día para el otro", contó acerca del momento en que decidió colgar los botines, allá por junio del 2020.
Su llegada al club se produjo en 2008, y la Gata recuerda que "En la Selección del 2002 fui sparring y nos conocimos con Seba (Verón). Después hubo un boom con su regreso al club y al fútbol argentino. Estudiantes se convirtió en un club que además de su historia, tenía a ese jugador al que todos veíamos y queríamos jugar con él. Cuando me llamó, ni lo pensé".
A lo largo de sus cuatro etapas en el club, la Gata consiguió 2 títulos, disputó 236 partidos y marcó 43 goles. "Fue un proceso en el que aprendí muchísimo. Estudiantes me hizo mejor jugador porque supe agregarle a mis cualidades y mi forma de jugar, un poco más de sacrificio. Empecé a disfrutar tirarme a los pies y la gente lo reconocía".
"Sebastián era el líder que siempre daba el ejemplo en los partidos o entrenamientos. Cuando sos joven ves las cosas diferentes a cómo las ve alguien con más trayectoria. En algún momento el vio que no estaba bien y me ponía un freno. Esa forma que tuvo de ser conmigo, lo tomé como un desafío y fue muy importante", destaca Gastón y remarca: "Tuvimos un tipo que nos mejoró a todos. Seba hizo que todos juguemos un poco mejor y eso es una virtud enorme, por eso fue tan grande".
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Alejandro Sabella fue otra de las glorias del club que dejó una marca imborrable en Gastón, que hoy se extiende en la relación que mantiene con la familia de su ex entrenador. "Nunca supe que las cosas que hizo conmigo fue porque el sentía que yo repetía su historia. Con Alejandro tuve desde el primer día esa empatía y forma de verlo como un padre. Tuvo gestos conmigo, como cuando yo no estaba bien futbolísticamente, y me hizo salir rápido de esos momentos".
Sin dudas que la identificación que la Gata logró con Estudiantes, pese a haberse formado en otros clubes, es un rasgo que el hincha no olvida. "La identificación la vas buscando, pero también se necesita de la aceptación. Desde que empecé a sentir este cariño y amor por Estudiantes, me preocupe mucho por cuidarlo, independientemente que mi carrera hizo que en algún momento mucha gente se enoje porque me iba. Pero cuando yo me iba de Estudiantes, ya tenía fecha de regreso".