En vísperas del duelo ante Tacuary en Asunción del Paraguay por CONMEBOL Sudamericana, Eduardo Domínguez habló con los medios en la sala de prensa del Country Club. "Llegamos bien al partido, recuperando a los jugadores para viajar. Benjamín (Rollheiser) ya se encuentra mucho mejor, así que mañana vamos a definir quiénes son los que juegan. Estoy contento porque todos se sintieron bien en el entrenamiento", dijo sobre al estado del grupo.
"Más allá de cómo llega el rival, tenemos que focalizarnos en hacer un gran partido con la motivación de que jugamos copa y la gente que nos va a acompañar. Tenemos que ir a buscar lo que queremos, como lo hicimos en Bolivia y en Brasil, dependerá de nosotros si ellos se plantan más alto o más bajo. Hay que mejorar lo que venimos haciendo. A partir de ahí podemos encontrar las situaciones de gol, ser precisos, tener movilidad y buenas asociaciones en ataque. Cuando entremos a la cancha veremos qué propone Tacuary", manifestó con respecto al plan de juego que buscará hacer Estudiantes.
Ante la consulta de los buenos números que suma el equipo, Domínguez respondió: "Las estadísticas no ganan ni pierden. Sí tengo en claro la solidez del equipo, tanto ofensivamente como defensivamente, la búsqueda siempre va a ser la misma aunque nos pueda costar o el rival nos quiera trabar el juego. Ahí tendremos que encontrar la soluciones. Queremos provocar constantemente que el rival haga algo diferente para generarnos daño. Yo creo que venimos bien, siempre hay cosas para mejorar, el margen es muy amplio. No tenemos que dejar que todas estas cuestiones nos hagan pensar que somos imbatibles. Cuando uno cree que está cerca, son los momentos más difíciles. Uno sin querer se desvía mentalmente, y no podemos hacerlo en los tramos finales. Ahora se empiezan a decidir cosas. Es cuando más compenetrados tenemos que estar".
Por último, el entrenador hizo una reflexión sobre las cargas físicas: "No tenemos el plantel de grandísimos equipos. A veces hay desinformación, porque los equipos internacionales rotan mucho, lo que pasa que entran jugadores de selección, acá son más notorias esas rotaciones. Vamos a ir a fondo hasta que haya que tomar una decisión. Mientras tanto, vamos con lo que creemos que es mejor para ese partido puntual. Si tenemos que competir en tres partidos seguidos con el mismo equipo lo haremos sin problemas, hasta que un jugador me lo diga que no puede estar. El jugador sabe cuándo está bien y cuándo no. Les damos la oportunidad de entender que somos un grupo. No necesitamos que todos jueguen 90 minutos. Es parte de la nueva dinámica que tiene el fútbol de hoy".