Por la primera fecha de la Copa de la Liga, Estudiantes le ganó 1-0 a Belgrano sobre la hora y empezó con el pie derecho su camino en el torneo doméstico. Eros Mancuso convirtió el gol que hizo delirar a todos los hinchas en UNO.
El arranque de partido tuvo acciones muy disputadas y algunas imprecisiones por parte de ambos equipos que hicieron el juego cortado en los costados de la cancha. Hasta que Pérez se hizo eje del Pincha y comenzó a mover los hilos. Sosa entró en la misma dinámica, buscando principalmente el cambio de frente hacia la derecha. En ese sector, Altamirano y Mancuso combinaron rápido y todo terminó en un centro que no pudo conectar Carrillo.
De milagro, el Pirata no abrió el marcador porque un remate de Moreno dio en el travesaño. Al Pincha esto le significó una llamado de atención, pero no cambió su forma y siguió construyendo buenos avances. Pérez, quien también se animó a romper hacia delante, habilitó a Ascacibar tras una gran apilada, el Ruso centró rasante desde la izquierda y Méndez definió exigido chocando con el poste.
Carrillo llegando a definir de cabeza, Altamirano rematando tras un contragolpe veloz y Fernández ganando en un córner, sumaron nuevas oportunidades claras del Pincha, que terminó dominando el primer tiempo y mereció irse en ventaja al vestuario.
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— Estudiantes de La Plata (@EdelpOficial) January 29, 2024
Belgrano decidió replegarse en el complemento, viendo que Estudiantes plantó bandera bien arriba, y buscó aprovechar espacios para correr. Pero ningún ataque veloz desarticuló al equipo de Domínguez. La sincronización entre Romero y Fernández fue estupenda para cerrar al límite y frustrar los intentos del pirata cordobés.
Estudiantes intentó ganarlo por todos los medios. Toque en corto, balones aéreos y media distancia fueron las rutas ofensivas más explotadas. Y el arquero Losada tuvo que trabajar sin descanso. Benedetti lo hizo reaccionar en el segundo palo y Mancuso forzó una atajada increíble en el suelo. Correa, ingresado en lugar de Méndez, resolvió muy alto en un mano a mano y con el arco vacío.
El merecido premio llegó sobre el final. A puro empuje, la hinchada y los jugadores acorralaron a Belgrano contra su arco. El tiempo se consumía, quedaban segundos. Zapiola recibió abierto en el lado izquierdo y sacó un centro perfecto al corazón del área, Mancuso llegó como una tromba y de palomita para generó la explosión del público albirrojo. Estudiantes festejó un triunfo agónico en un partido sumamente difícil hasta el último suspiro.
En la próxima fecha visitará a Unión en Santa Fe en busca de un resultado positivo, el jueves desde las 21.30.
