Las crónicas de la época narraban sus batallas automovilísticas contra grandes de la categoría como Roberto Mouras, Oscar Aventín, Oscar Castellano o Emilio Satriano. Aquel día, un 5 de Diciembre de 1982, el "Gaucho de Bolivar" escribiría su nombre con letras de oro en el automovilismo argentino: aquel día se consagraría campeón del Turismo Carretera- tal vez, junto al fútbol- el deporte más popular de nuestro país.
Jorge Martinez Boero nació en Capital Federal en el año 1937. Años más tarde, emigraría hacia La Plata para estudiar Medicina, y en aquel momento se enamoró de Estudiantes. Siguió durante muchos años al equipo albirrojo por los torneos locales, hasta que decidió mudarse a Bolivar, una ciudad en el centro de la provincia de Buenos Aires. Ya había sido corredor de motos, pero decidió tomar el camino de las cuatro ruedas y comenzar su derrotero en el Turismo Carretera, la categoría madre del automovilismo nacional.
"El Gaucho de Bolivar" fue su apodo, por su atuendo de bombacha de campo, pañuelo y botas. Debutó en 1967 en Olavarría, logrando instalar su nombre como un referente en aquella época. En 1974 peleó su primer título, aunque culminó tercero. La vida comenzaría a golpear a la familia Boero: en 1976 muere su hija Paula, y Jorge se alejó de las pistas durante el final de aquella década.
1981 fue el año donde volvería a correr, sobreponiéndose al dolor de la pérdida de su hija, y al año siguiente conseguiría su gran objetivo: salir campeón del TC. Jorge se impuso en dos ocasiones en San Miguel del Monte, Tandil, Olavarría y Buenos Aires. Volvería a nuestra ciudad para obtener el segundo puesto, y se consagraría con un tercer lugar en el autódromo de Tandil.
Las crónicas de la época también cuentan que su llegada a Bolívar fue todo un acontecimiento: recibido en la autobomba de los bomberos, con la característica sirena retumbando en cada rincón de la ciudad. La lluvia le agregaba un tono místico y emotivo a la escena. En total, Martinez Boero corrió en 180 ocasiones, donde obtuvo 10 victorias. Un dato de color: nunca fue protagonista de un accidente.
"El Gaucho de Bolivar" falleció en 2004, y sus restos descansan en el cementerio de aquella ciudad, donde es una personalidad destacada. Su hijo, Jorge Martinez Boero (h), fue víctima de una tragedia: en 2012 corrió el Dakar en motocicleta, como forma de homenajear a su padre y al título de Turismo Carretera obtenido 30 años antes, pero murió tras un accidente en la primer etapa de la prueba.