Estudiantes va por más en la Superliga. Por la tercera fecha del campeonato el conjunto de Leandro Benítez se las verá, en el estadio del barrio Alberdi de la provincia de Córdoba con Belgrano. Para este partido, que será abitrado por Nicolás Lamolina, el entrenador Leandro Benítez "guardó" a varios jugadores pensando en lo que será el choque revancha de los octavos de final de la Conmebol Libertadores ante Gremio del martes próximo.
El Pincha llega a Córdoba con el ánimo por las nubes. Claro que la victoria sobre Boca del lunes pasado sirve de trampolín para lo que debe afrontar el equipo, ya sea el cotejo de hoy con el equipo que dirige Lucas Bernardi o lo que vendrá por la Conmebol Libertadores. Los pupilos de Leandro Benítez en el triunfo sobre el xeneize plasmaron todo el trabajo de la semana, donde la presión sobre la salida del rival y la agresividad en tres cuartos de cancha en adelante fueron sus ejes para dejar sin reacción a quien hasta este día acumulaba 617 como líder absoluto del fútbol argentino.
Esa forma de jugar, de atacar, debe volver a ponerse en práctica hoy ante Belgrano. Claro que el Pirata no cuenta con las "estrellas" que sí acumula Boca, pero sí sabe de la importante que tiene el partido de esta tarde-noche y por ende asumirá el rol de protagonista. El celeste hasta aquí no gano, acumula dos empates en fila; y las urgencias por sumar puntos (y triunfos) para no sufrir con el promedio le da un plus a Estudiantes se jugar con la desesperación y la presión que le recerá a los futbolistas cordobeses desde que Lamoline pite el inicio del cotejo.
Como quedó dicho para hoy el Chino Benítez no pondrá en cancha el mismo once que arrancó con Boca y Godoy Cruz, ya que el entrenador optó por darle descanso a Schunke, Erquiaga, Apaolaza y no arriesgar a Braña a fin de que estos cuatro equipistas puedan estar en las mejores condiciones para la revancha por los octavos de final de la Libertadores con Gremio del martes venidero.
Estudiantes va por más. Sabe, a partir de lo hecho el último lunes, que las exigencias son mayores; pero también es consciente de que a partir de su libreto, su forma de plantear los partidos, las chances de seguir por la franja positiva son muchas más allá del rival de turno y de los cambios de jugadores que lleve adelante su entrenador.