Sin perder de vista el objetivo primario, que es acceder a los octavos de final de la Copa Conmebol Sudamericana, pero con una idea clara de lo que se pretende en el Torneo Binance 2023, estar metido entre los cinco mejores, Estudiantes afronta hoy otro partido del campeonato doméstico en UNO. Desde las 19.00 y bajo el arbitraje de Nicolás Lamolina, el Pincha recibe a Banfield.
Para esta tarde noche el entrenador Eduardo Domínguez recupera a dos piezas fundamentales, que las pudo utilizar muy poco: Guido Carrillo y Franco Zapiola. Con ellos dos el plantel está prácticamente completo, sin contar, está claro, con la baja hasta fin de año de Pablo Piatti y a última hora se le sumó la del juvenil Axel Atum. Con este panorama el técnico puedo armar y desarmar de mitad de cancha hacia adelante como se le antoje pero sin dejar de lado la esencia que lo llevó hasta aquí para ganar ocho de los últimos diez cotejos; es decir una zona media con juego y quite; y con atacantes que no solo pisan y juegan dentro del área, como Mauro Boselli; sino que sean verticales y colaboren con la creación: Benjamín Rollheiser.
El equipo viene de sortear un duro escollo en Varela y ahora deberá superar otro juego por demás exigente. Las realidades entre Defensa y Banfield son literalmente opuestas, pero el Taladro está ahorcado con el promedio y por ello volvió a recurrir a Julios César Falcioni para que lo saque de esa incómoda posición, y al experimentado técnico le sobra paño para que los sureños puedan cumplir con esa meta. Y en este sentido es donde Estudiantes no deberá desesperarse ni volverse loco si el gol no llega, porque el Taladro seguramente apostará a un juego cortado, que todo pase por el medio, evitar que su arquero tenga que "trabajar" y jugársela todo por el todo a una pelota detenida en ataque.
Estudiantes debe y tiene que trabajar el partido, buscar las mejores opciones para lastimar a su rival. Que sus ofensivas no desemboquen en centros, algo que terminó sucediendo en Florencio Varela; y que las sociedades Rodriguez-Ascacibar, Boselli-Rollheiser, Godoy-Rollheiser, Benedetti-Rodríguez, por dar cita a algunas de ellas; sean quienes logren el desequilibro que sirve a la postre para vulnerar la oposición banfileña.
Con todas las cartas sobre la mesa, Estudiantes tiene la gran oportunidad de volver a sonreír en el Torneo Binance y dejar en claro que lo suyo, más allá del objetivo primario que es meterse en los octavos de final de la Copa Conmebol Sudamericana, es dar batalla sin cuartel a aquellos equipos como River, Defensa, Talleres que hoy asoman como los potenciales exponentes al título. Lo que suceda esta tarde-noche en UNO puede resultar casi determinante para dicha misión.
