Estudiantes necesita como el agua una victoria para poder culminar de la mejor forma este 2016 en el Torneo Federal de básquet. Y la premisa no será sencilla porque el rival de turno que llegará al Country es uno de los mejores de la liga: Ramos Mejía. El juego dará comienzo a las 21.30.
El Pincha hoy es el peor equipo de la competencia por una mera cuestión de partidos ganados y perdidos; y no por su juego pero claro los números mandan y hoy Estudiantes debe revertir su situación con triunfos.
Lo bueno para Mauricio López es que recuperó a Facundo Attademo, algo que hoy le dará mayor tranquilidad en la conducción de las ofensivas ya que el Zurdo es base natural y por ende no debe exigir en ese rol a Federico Attademo, Gabriel Cejas o Lautaro Noguera. La presencia del citado "playmaker" le dará la chance a Estudiantes lograr esas transiciones rápidas que en varios partidos no pudieron llevarse a cabo por no contar con un jugador exclusivo para armar esos ataques.
Pero claro más allá de la vuelta de Attademo, el gran dilema a deshilvanar para los albirrojos pasa por los ataques fijo y que los internos puedan prevalecer sobre sus oponentes. Pablo Marini hoy es quien pasó a ser pilar en ese rol, ya que Michele Castro está "averiado" y el cuerpo técnico trata de preservarlo para que la lesión en el aductor no se le agudice y pueda volver de la mejor forma a la pretemporada del 2017.
El crecimiento del juego colectivo de Estudiantes fue de menos a más pero las lesiones y la necesidad de tirar muchos pibes a la cancha lo llevó a que no reciba el premio merecido en los últimos juegos.
Hoy como quedó dicho las urgencias son mayores porque es el penúltimo partido del año, porque Estudiantes debe y necesita torcer el rumbo de la historia y porque a la vez tiene que demostrarse asimismo que pueda superar a rivales como Ramos Mejía que posee en su plantilla jugadores de renombre.
