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Basquetbol • 17 octubre 2015

Debut triunfal

El quinteto pincha venció a Estudiantil Porteño 89-77 en el Country Club. El equipo albirrojo supo reacomodarse en un juego que se le complicó cuando la visita lastimó desde larga dimensión. Juan Sartorelli fue el máximo anotador en el ganador

Estudiantes tuvo su debut triunfal en el inicio de la quinta temporada del Torneo Federal. En el Country venció a Estudiantil Porteño 89-77 con una gran actuación de Juan Pablo Sartorelli que dijo "acá estoy" en los momentos más críticos para el conjunto pincha.

No sólo Sartorelli hizo de las suyas, sino que fue muy grato el debut de Lautaro Noguera. El alero hizo daño desde larga dimensión y jamás le tembló la muñeca ni le pesó el partido más allá de que este 16 de octubre fue su bautismo en el TFB. Además de Noguera, Cordero convirtió 13 unidades, Ruger 14 y Bendel 13.

Estudiantes fue más que la visita en el primer cuarto. Hizo daño con Ruger y Leo Rodríguez bajo la tabla más allá que en líneas generales estuvo errático y por eso Porteño estuvo a tiro en el score. Fue cuestión de que la rotación del balón y que los tiros de tres puntos se hagan presentes para que el Pincha tome una buena luz y se vaya al primer descanso al frente 24-16.

Si fue bueno el cierre del primer cuarto, mejor fue el comienzo del segundo con un parcial de 8-2 a partir de dos triples de Cordero y una con conversión de Sartorelli. Cuando todo hacía suponer que Estudiantes tenía que darle el último golpe para voltear a su rival, Estudiantil Porteño reaccionó en base a su defensa zonal. Esa manera de defender fue determinante porque el Pincha se quedó sin gol, no jugó más interior, dependió de los lanzamientos de Cejas, Sartorelli o Cordero y en un lapso de 3 minutos la visita no solo se puso en partido sino que gracias a Alvarez empardó el juego en 41.

Tras perder ese parcial 25-17, Estudiantes cambió la cara o mejor dicho reaccionó en el momento justo. Estudiantil Porteño con dos bombas de Alvarez y Dameli de pronto sacó 12 puntos de distancia 56-44. Ese triple de Alvarez sirvió para el sacudón del equipo. Defendió mejor su canasto, pasó a una zona, y volvió a meter la bola bajo el cesto y si Ruger o Rodríguez no podían meterla; los triples de Cordero, Noguera y Sartorelli desarticularon todo lo que había tejido la visita. Así a falta de 1.35 quedó 62-60 abajo y a posteriori volvió a dominar el resultado 65-64.

En el cuarto final Estudiantes más confiado, o mejor dicho tan confiado como en el primer cuarto, controló el partido y si bien la visita se mantuvo con vida gracias a Barrios, Sanchez y Alvarez; nunca los pupilos de López sinteron que se le escaba el partido porque Sartorelli, Noguera y Cordero le clavaron dagas a Porteño desde tres puntos y porque al mismo tiempo la defensa fue clave para controlar a Barrios (hasta que estuvo en cancha), Alvarez y Del Peral.

Estudiantes debía ganar y ganó.  Si bien tuvo que trabajar el partido, la victoria 89-77 no hace más que afirmar que los pergaminos logrados la temporada anterior no fueron en vano.

 

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