Oficina Virtual Oficina virtual
ADN • 23 agosto 2015

"AQUEL GOL LO CONVERTÍ JUNTO A 60 MIL PERSONAS"

Autor ni más ni menos que del gol en la primera final contra el Manchester United, hombre multicampeón con el Pincha y gloria albirroja, Conigliaro recuerda - a sus más de 70 años - al Estudiantes de Zubeldía y una gesta histórica que marcó un antes y un después en el fútbol. Mano a mano imperdible.
Compartir

Historia viva y pura de la vida de Estudiantes, Marcos Conigliaro supo ser es y siempre será, eternamente, un fiel representante de la mística albirroja. Multicampeón con la institución, tricampeón de América y campeón del mundo, una de las glorias pincharratas supo ser parte del recordado Estudiantes de Osvaldo Zubeldía y autor ni más ni menos que del gol en la primera final contra el Manchester United que abrió paso para lo que sería la obtención del título en territorio inglés.

SU VIDA EN SANTA FE

Instalado hace ya varios años en San Jorge, provincia de Santa Fe, Conigliaro sigue ligado al fútbol y pegado a la actualidad del Pincha. Hace poco, incluso, visitó la ciudad donde pudo recorrer el country, la sede y estar junto a muchos de sus afectos con los que compartió innumerables recuerdos: "Estoy trabajando en un club de la zona hace rato. Desde que vine en el '96 que estoy trabajando en el fútbol. Hace poco estuve tres días visitando el country, la sede, la cancha nueva; fui invitado por el club. Me pone muy contento verlo como está y como va actualmente", cuenta el ex delantero albirrojo, mano a mano con el Sitio Oficial del club.

GRANDES RECUERDOS EN SU CORAZÓN

"Tengo los mejores recuerdos que me ponen muy contento por todo lo conseguido, las copas, lo obtenido con ese equipo de Zubeldía. Ganar la copa del mundo no se logra todos los días. Guardo grandes recuerdos de todas esas epopeyas con todos los compañeros que tuve en ese momento. Soy un agradecido a la gente que todavía se acuerda de nosotros. Mi vida cambió desde el momento que llegué a Estudiantes. Ahí aprendí a que lo más importante no era el "yo", sino el conjunto, y a raíz de eso es que se pudieron conseguir tantas cosas. Siempre fue un equipo en el que la solidaridad y el compañerismo estuvo por encima de todo. Gracias a eso conseguimos formar una gran familia que se mantiene hasta el día de hoy", revela, emocionado, al recordar todo lo que le dio Estudiantes y el significado que tiene la institución en su vida.

UN EQUIPO QUE TUVO COMO GUÍA A UN ADELANTADO

Las críticas por aquellos tiempos en épocas del multicampeón eran materia corriente. Sin embargo, el paso de los años le terminó dando la razón a un equipo y una forma de vivir el fútbol que trascendió y que hizo historia. El ADN de Estudiantes, una huella y una marca registrada que Conigliaro sabe y reconoce les valió amores y odios: "Nosotros fuimos muy criticados porque un equipo como era Estudiantes que llegara a ganar tres copas libertadores, una interamericana, una del mundo, campeonato argentino; buscaban la forma de intentar bajarnos porque los equipos "grandes" pasaban totalmente desapercibidos. Decían que usábamos malas artes, que hacíamos tiempo; pero la realidad era que éramos muy buenos, con buenos jugadores e inteligentes a la hora de plantear los partidos con un técnico que vivió diez años adelantado al resto".

EL COMIENZO DE LA GRAN GESTA EN MANCHESTER Y SU GOL

El abrazo de los jugadores del Manchester al haber perdido la primera final en Argentina daba cuenta del desprestigio y el desconocimiento hacia un equipo que haría historia pocos días después en Old Trafford. Dándose por ganadores, los jugadores del equipo inglés se iban de la cancha de Boca satisfechos por la caída por la mínima. Sin embargo, Madero recuerda esa noche y la posterior obtención del título que no hizo más que demostrar de lo que era capaz Estudiantes: "Nos hizo sentir que ellos no sabían la clase de equipo que éramos nosotros. Estaban convencidos que íbamos allá y que nos iban a golear pero Estudiantes demostró el carácter que tenía ese equipo y la voluntad de nuestro juego, de ayudarnos entre todos. Aquel gol en la final lo convertí junto a 60 mil personas que estaban en la cancha. Todos me ayudaron a levantarme en el aire y a cabecear esa pelota, y por eso salí corriendo a festejarlo con toda la gente", recuerda.

CAMPEÓN DEL MUNDO EN INGLATERRA, "LO MÁXIMO"

"La primera señal fue cuando ganamos la final en cancha de Boca 1-0, que fue una epopeya, porque tener que ir a disputar la vuelta a Inglaterra con el Manchester United, en la famosa 'Caldera del Diablo', no nos achicó para nada; al contrario. Jugamos de tal manera que fue emocionante ver a ese grupito que alentaba sin parar. Dar una vuelta olímpica en Inglaterra fue lo máximo. Gracias a Estudiantes cumplí el sueño del pibe", cierra Conigliaro, con emoción y un recuerdo que quedará para siempre en las páginas doradas de Estudiantes.

Axel Damian Padilla

 

Socios protectores
Ver más novedades