Los desafíos están para afrontarlos y así sucedió y volverá a suceder en la vida de Leandro Benítez como entrenador. Primero ocurrió tras la salida de Nelson Vivas, allá por el mes de junio y ahora con la renuncia de Gustavo Matosas, el Chino vuelve a tener la responsabilidad de tomar el timón del barco.
Y en esta nueva conducción, interina, deberá encarar en lo que será su primer compromiso, en su segundo ciclo, nada menos que ante San Lorenzo, elenco que también llega golpeado por la eliminación en la Copa Libertadores que a la vez se quedó sin entrenador porque Diego Aguirre dio un paso al costo tras perder con Lanús en jueves último en La Fortaleza Granate.
"Quiero darle una mano al club en este momento, le dije a la dirigencia que estaba a disposición para cuando el club me necesite", enfatizó el Chino Benítez el viernes cuando se sentó en la sala de Prensa Roberto Sbarra para responder a el interrogatorio de la prensa.
Este segundo ciclo viene precedido de muy buenas presentaciones de Benítez como entrenador superior. Como quedó dicho en junio del corriente año asumió luego de que Vivas dejara el cargo tras un año y cuatro meses; y su debut fue también en la cancha de Quilmes (escenario donde el lunes Estudiantes vuelve a oficiar de local debido a que el Estadio Ciudad de La Plata está imposibilitado de usarse por la serie de recitales de rock que se desarrollarán desde el 1 de octubre hasta mediados de diciembre) frente a Belgrano de Córdoba. El resultado final fue 2-0 y esa misma tarde del 17 de junio Mariano Andújar cumplió 200 partidos con la camiseta de Estudiantes.
Tras el éxito ante el Pirata se sucedieron dos victorias más, 2-0 sobre Godoy Cruz en Mendoza y 1-0 a Quilmes en la cancha de Arsenal (fue local en Sarandí). Este último triunfo le significó al Chino Benítez otro impacto positivo en su exitosa y corta carrera como entrenador. ¿Cuál? Clasificar al equipo a la edición 2018 de la Copa Libertadores de América. Ese día en el Viaducto, el joven entrenador berissense cedió su lugar en la plantilla superior e inició su periplo como DT de la reserva y los pasos eficaces continuaron: dos triunfos (Arsenal y Colón) y un traspié (Defensa y Justicia). Pero a la vez un trabajo convincente donde buscó apuntalar a jóvenes valores de la cantera con enorme futuro como Ivan Erquiaga, Juan Díaz, Matías Pellegrini, Matías Ahumada, Franco Sivetti, Facundo Mura, por citar algunos de los futbolistas que afianzó en el equipo "relevista".
"Yo soy empleado de Estudiantes y quiero devolverle algo de todo lo que me dio", y bajo esa tesitura el Chino Benítez volverá a sentarse en el banquillo principal. El primer obstáculo a superar se llama San Lorenzo, "seguramente va a ser un partido muy complicado. Tenemos que estar atentos a los pequeños detalles, que son los que te hacen ganar o perder partidos"; aunque más allá del equipo a enfrentar el desafío es mantener su invicto y su impronta como un entrenador. "Dirigir es algo hermoso, pero estoy tranquilo, no pienso más allá del lunes".