El partido comenzaba favorable a las locales que aprovechaban los errores del Pincha que fallaba en la definición cuando tenía que encontrarse con la figura de Valentina Kogan, arquera de la selección nacional, pero rápidamente ajustó la defensa y emparejó las cosas con las salidas de contragolpe producto de la solidez del bloque defensivo y un muy buen trabajo de la portera estudiantil Luciana Cacerez, que mantenía viva las chances de las platenses.
Sobre el final del la etapa inicial un fallo polémico de uno de los árbitros que tomo la decisión de expulsar a Rocío Campigli parecía poner complicada las cosas para las albirrojas de cara a los últimos 30 minutos que arrancaría con igualdad en 10 goles.
Ya en el complemento Agustín Orqueda movió las fichas para que no se note la ausencia de Campigli y el desarrollo del encuentro siguió sumamente parejo como se esperaba del duelo de dos equipos que pelean en la máxima categoría del handball metropolitano.
Cuando faltaban 10 minutos del segundo tiempo Estudiantes logró una mínima ventaja de dos goles que supo mantener gracias al trabajo defensivo que fue de los puntos más altos que tuvo en el encuentro y ya sobre el final la diferencia aumentó producto que las locales buscaban desesperadamente achicar la brecha, embates que no pudieron revertir la victoria estudiantil por 22-18 y el boleto a semifinales.
A pesar de haber sido un triunfo importante contra los pronósticos que ponían como favorito al local no hay tiempo para los festejos porque ya esta tarde tendrá un nuevo encuentro, esta vez el de semifinales, frente a un siempre complicado Nuestra Señora de Luján que viene de ser el subcampeón en el último Metro Clausura y dejó en el camino a Sedalo, donde las albirrojas si quieren tener chances de llegar a la final deberán volver a hacerse fuerte en defensa como en el partido frente a Vicente López.