Cuando llegó del pequeño pueblo de Inés Indart allá por mediados de los años 80, Fabián Barbieri jamás imaginó que se convertiría en un icono de nuestro básquet, no sólo por los títulos logrados, sino por ser una persona muy decisiva en la formación de grandes jugadores que surgieron de la cantera de Estudiantes.
"Es muy gratificante para nosotros ver cómo un jugador que se desarrolló desde chico en el club, hoy llegue a jugar en Primera División de Estudiantes o en alguna Liga importante. Pero también gratifica que ellos o aquellos que no han podido llegar a esos lugares, traigan a sus hijos a la misma cantera de la que formaron parte", enfatizó el Flaco, que hace unas semanas celebró los 30 años del ascenso a la Primera A de Capital Federal.
En su rol de formador, Barbieri destacó todo lo que significó para él y para el club la labor durante años en las categorías formativas de Ariel Barci. "Con él inicié mi camino hacia la formación de jugadores en la Escuela de Básquet y a partir de ahí empecé mi carrera como formador."
- ¿Qué es ser un formador?
- Alguien que forma desde lo humano y lo deportivo, predicando con el ejemplo, transmitiendo a cada momento todos sus conocimientos y valores que fue adquiriendo a lo largo de su vida, en cada etapa de su propia formación.
- ¿Que tiene que tener un formador?
- El formador debe tener muchas cualidades, poseer liderazgo. Debe enseñar, motivar, escuchar, acompañar tanto dentro como fuera de la cancha a sus alumnos y por sobre todo educar y transmitir valores. Además algo clave que tiene que tener en cuenta un formador es que tiene que ser el ejemplo para los chicos, la mayoría de las veces no sirve solo la educación mediante el habla, nuestra forma de expresarnos o nuestras acciones marcan mucho lo que los niños perciben de nosotros.
- ¿Quiénes fueron tus formadores?
- A lo largo de mi carrera tuve varios entrenadores de los cuales aprendí mucho, sin dejar de mencionar todas las herramientas de formación que adquirí en el Profesorado de Educación Física, que me ayudaron considerablemente. Pero si tengo que nombrar un entrenador que haya contribuido en mi formación, ese es Ariel Barci. Con él inicié mi camino hacia la formación de jugadores en la Escuela de Básquet y a partir de ahí empecé mi carrera como formador.
- ¿Cuál es el mejor aprendizaje que te dejaron tus formadores?
- Más allá del desarrollo deportivo, fue la educación como ser humano que me dejaron. Me transmitieron valores, me enseñaron a tener responsabilidad, ser compañero y sobretodo ser una mejor persona. Todos de una manera u otra fueron forjando mi vocación para transmitir esas enseñanzas y la de ser un mejor formador de jugadores de básquet.
- ¿El mejor consejo que te dio un formador y vos aplicás hoy?
- Un entrenador me dijo: "Para enseñar básquet hay que tener mucha pasión, dedicación y saber educar día a día para que tus jugadores no sólo jueguen al básquet, sino también para que se desarrollen en la vida."
- ¿Cómo es formar personas y deportistas con el ADN de Estudiantes?
- En el Pincha, al formar deportistas con nuestro verdadero ADN es fundamental transmitirles el sacrificio, compromiso, el no rendirse jamás, la pasión por lo que se hace y el amor por nuestra camiseta. Es muy gratificante para nosotros ver como un jugador que se desarrolló desde chico en las divisiones menores, hoy llegue a jugar en Primera División del Club o en alguna Liga importante, pero también gratifica que ellos o aquellos que no han podido llegar a esos lugares, traigan a sus hijos a la misma cantera de la que formaron parte.
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