En los octavos de final, Estudiantes quedó eliminado del Torneo Apertura tras caer 2-0 frente a Rosario Central en el Gigante de Arroyito.
El capítulo inicial resultó muy parejo. Ante el mejor equipo de la fase regular, Estudiantes disputó la pelota en mitad de cancha aún sin tanta lucidez en la distribución. Y los ataques nacieron, principalmente, del sector derecho. Meza disparó elevado tras combinar en la medialuna y, tiempo después, Palacios sirvió un buen centro y Carrillo cabeceó sin dirección a las manos de Broun.
El Canalla optó por el juego directo, mostrando a un López muy incisivo en todo el frente de ataque. Pero fue Copetti quien advirtió al fondo albirrojo, y Mansilla detuvo a puro reflejo un disparo cercano. No obstante, el Pincha volvió a gobernar la pelota mediante Neves y Medina en el tramo final del primer tiempo, demostrando así su templanza para jugar un partido importante.
Domínguez modificó ambos laterales para el complemento, visiblemente cansados por el trajín de competencias. Benedetti y Sosa ingresaron de gran manera, integrándose al circuito de juego y desacoplando las marcas que dispuso el dueño de casa. Una conexión entre ellos derivó en un centro rasante que despejó Quintana, cuando se relamía el 9 pincharrata en su zona favorita.
Central tiró de arrestos individuales y sorprendió por duplicado al contragolpe, pero Mansilla tuvo estas situaciones bajo control. Acto seguido, Palacios respondió apilando rivales y definiendo ante la reacción del guardameta académico. El Pincha calmó las aguas, empezó a tocar y se adueñó del juego, observando que los espacios condecidos por el local le abrieron una posibilidad.
A falta de 20 minutos, un hecho inesperado cambió el rumbo del encuentro. Carrillo sintió una molestia y tuvo que retirarse del campo, pero Estudiantes ya había agotado las cinco modificaciones y jugó hasta el final con diez hombres. Así las cosas, Rosario Central fue a la carga con todo su arsenal ofensivo. Y la balanza terminó inclinándose a su favor en un tiro libre que Quintana conectó de cabeza para abrir el marcador.
Sobre el cierre, los hombres albirrojos buscaron el empate pero Campaz asestó el golpe definitivo en una transición rápida. El Pincha entregó todo su resto físico y cayó de pie en el Gigante de Arroyito. Sin dudas que la eliminación duele, pero el calendario le marca un compromiso crucial el próximo miércoles en Río de Janeiro ante Botafogo por la Copa CONMEBOL Libertadores.
