Estudiantes festejó lo que tanto bregó en su campaña en la Liga A2 de voley masculino: la continuidad en la competencia, la segunda más importante a nivel nacional. Su victoria sobre La Matanza y los resultados adversos del citado equipo le dieron al elenco de Mauricio Arrúa lo que fue a buscar a Mendoza, la permanencia.
La participación pincha en el repechaje que organizó Tunuyán fue de mayor a menor, o mejor dicho varió a partir de que previo a su última participación ya tenía el boleto a la Liga del 2019 en el bolsillo.
En su primera salida a la ronda final Estudiantes derrotó 3-1 a La Matanza, situación que le llevó a aclarar el panorama y a jugar los siguientes partidos tranquilo porque ya tenía un triunfo en el bolsillo. Luego perdió con La Calera de Córdoba 3-1, pero la derrota de La Matanza con Tunuyán lo dejó a tiro de conseguir la permenencia.
Ya en la jornada final, el sexteto pincha se "salvó" previo a su última presentación. La Calera batió a La Matanza 3-1 y por ende el perdedor quedó condenado a jugar el año próximo en la B1. Así con el resultado puesto Estudiantes salió a jugar sin obligaciones ni presiones ante Tunuyán, quien ganó 3-1 y se adjudicó invicto esta ronda repechaje.
Ahora Estudiantes, con la tranquilidad de saber que en el 2019 seguirá en la A2, podrá afrontar su nueva temporada en la Liga de Honor de la Federación Metropolitana.
