Poco importó la lluvia ni le intensidad de la misma. El plantel de Estudiantes continuó bajo el intenso trabajo de pretemporada y en esta oportunidad lo llevó adelante más allá de las pésimas condiciones climáticas.
Bajo un cielo completamente encapotado, los pupilos de Lucas Bernardi iniciaron el tercer día de entrenamiento. Un grupo de jugadores continuó con las evaluaciones de ergo espirometría; y otros saltaron al campo principal del predio para, primero cumplimentar tareas físicas, por cierto por demás exigentes; y luego formar parte del táctico en espacios reducidos que ordenó llevar adelante el entrenador.
Mientras la lluvia comenzó a ser más copiosa, y sin la necesidad u obligación de parar en el rectángulo de juego con once eventuales titulares -porque la pretemporada recién está dando sus primeros pasos- el técnico pincha dividió la plantilla en dos equipos y por ejemplo en una mismo formación colocó a Jonatan Schunke, Gastón Campi, Marco Borgnino, Lucas Rodríguez, Juan Otero, Israel Damonte, Rodrigo Braña, Lucas Melano; por citar algunos futbolistas.
A medida que el trabajo fue ganando en intensidad, la lluvia fue en franco ascenso y esto no impidió que todo lo programado pueda cumplirse. Una vez que los truenos comenzaron a "retumbar" en City Bell, Bernardi hizo sonar su silbato y mandó a sus dirigidos al gimnasio de musculación.
Todo concluyó con ejercicios de elongación y estiramientos en el "gym" bajo la supervisación de los profesores Hugo Roldán y Horacio Ferrer.