Era una parada difícil y lo sabían, pero si pudieron con el campeón Dorrego también era posible con el subcampeón. Estudiantes recibió a Ferro, uno de los históricos de la competencia, y luchó de principio a fin en busca del triunfo. Lideró el marcador en gran parte del primero tiempo, pero el Verdolaga se repuso y jugó un buen complemento para quedarse con la victoria por 25-30. La albirroja, María Emilia Acosta, fue la goleadora del partido con 8 tantos.
Los primeros 20' consistieron en un intercambio gol por gol casi permanente. La defensa de Estudiantes se cerró bien en el medio, impidiendo que le llegue la pelota limpia a la pívot de Ferro y, a su vez, obligando al rival a utilizar a sus extremos. Acosta fue lo mejor del Pincha, pero sufrió dos exclusiones en los últimos 10', situación aprovechada por la visita para adelantarse en el marcador. El local perdió la paciencia en ataque y pasó de liderar 10-8 a la derrota parcial por 10-13 al momento de irse al descanso. El Verdolaga convirtió cinco goles consecutivos en un pasaje con mucho ritmo ofensivo y buena circulación de balón.
En el regreso a la cancha, el desarrollo fue similar al de los últimos instantes de la primera etapa, con un Ferro dominador en el juego y en el marcador, y un Estudiantes corriendo de a atrás sin darse nunca por vencido. La visita sacó la máxima diferencia y se puso 13-19. El equipo de Nicolás Cardoso apostó a una defensa 5-1 con Inés Salinas encima de Victoria Crivelli y a Lucía Dalle Crode como central. Las estrategias funcionaron y las albirrojas lograron ponerse a tres goles (20-23). En el mejor momento, la exclusión de Macarena Piccinini fue un baldazo se agua fría. En superioridad numérica, Ferro se alejó otra vez y el local nunca pudo acortar la brecha. Finalmente, fue derrota por 25-30.
El Pincha sumó su cuarta derrota al hilo y bajó a la undécima posición de la tabla general. En la próxima fecha visitará al último, Muñiz, con la gran oportunidad de reencontrarse con la necesaria victoria para dejar atrás esta mala racha.