Las chicas habían arrancado parejo el encuentro, alternando errores con aciertos, pero de a poco el conjunto local comenzó a hacer mella sobre aquellas deficiencias que mostraban las albirrojas y así Lanús prácticamente liquidó las acciones con los últimos 15 minutos de la primera etapa donde sacó una diferencia prácticamente determinante.
El primer tiempo durante los primeros minutos se hacía parejo porque ambos conjuntos no lograban ser del todo prolijos, lo que hacía que el marcador se mantuviera con bajo goleo llegando al primer cuarto de hora 6-4 arriba para las locales. El granate mejoró y el Pincha no le encontró la vuelta ya que en ataque las chicas no encontraban situaciones de lanzamiento cómodas debido al funcionamiento de la defensa local, siendo determinante para llegar al descanso 14-7 abajo las dirigidas por Nicolás Cardoso.
La falta de puntería al arco rival fue una de las grandes falencias que mostraron las albirrojas a lo largo de los 60 minutos, si a eso le sumamos los errores de pase y control de balón, fueron factores determinantes para que el local maneje con tranquilidad todo el complemento, sin que peligra en ningún momento su victoria que terminó consolidando sobre el cierre para un 26-18 contundente, que enciende las alarmas del conjunto estudiantil.