El conjunto dirigido por Mauricio Torres no pudo aguantar el ritmo del encuentro debido a la gran cantidad de ausencias con las que contó anoche, con seis jugadores afuera por distintas afecciones, no pudiendo contar con el recambio necesario para un partido con la intensidad que demandaba el conjunto alemán que le dio minutos a sus 15 jugadores.
El primer tiempo fue sumamente parejo a lo largo de los 30 en donde prácticamente no se sacaban diferencias debido al gran trabajo defensivo estudiantil, donde se hacía fuerte, contrarrestando el peso irregular que tenía al momento de atacar. La paridad se mantuvo hasta el último minuto y medio que fue fatal para los albirrojos porque cometieron un par de errores que le dieron la posibilidad a su rival de sacar una diferencia de tres goles, que era inexistente en el desarrollo, llegando al descanso 16-13 a favor de los dueños de casa.
El golpe del cierre del primer tiempo se vio reflejado en el comienzo del complemento donde el Pincha acusó recibo y le costó volver a meterse en partido en los primeros minutos, y cuando comenzaba a recuperarse cometía fallas infantiles que dilapidaban las chances de volverse a la plata con la victoria. Una diferencia de cinco goles manejo Polvorines que logró aumentar en los últimos minutos para sellar su victoria 32-23, que hunde aún más a los albirrojos en su pelea por salir de la zona de descenso directo.