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ADN • 14 febrero 2016

"VER A LA GENTE GRITANDO ESE GOL FUE INOLVIDABLE"

Siete años pasaron de su estadía en el club con momentos intensos que lo marcaron a fuego en su carrera. Sánchez Prette, parte del plantel del 2009 que logró la Libertadores y hombre gol del agónico 1-1 en el clásico ante Gimnasia, dialogó mano a mano con el Sitio Oficial y recordó su paso por Estudiantes.
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Cristian Sánchez Prette llegó en 2009, un año que sin lugar a dudas no sería uno más en la historia de Estudiantes, para atravesar un paso en el que dejaría su marca, como así también lo haría la institución en su persona al punto tal que al día de hoy tiene los mejores recuerdos del Pincha. El ex mediocampista albirrojo, el de los dos goles a Cruzeiro en la fase de grupos, el del agónico grito en el clásico del 1-1 contra Gimnasia sobre la hora, dialogó mano a mano con el Sitio Oficial y rememoró su etapa en la ciudad.

"UNA DE LAS MEJORES EXPERIENCIAS QUE TUVE"

A nivel profesional, Estudiantes fue el tercer club en la vida de Sánchez Prette después de Huracán y el Cluj de Rumania. Con el sello distintivo del Pincha, el futbolista quedó marcado por el ADN albirrojo. Así es como, al día de hoy, no duda en destacar lo que ha significado vestir los colores rojo y blanco en su carrera: "Fue una de las mejores experiencias que tuve en lo futbolístico, hice grandes amigos, muchos compañeros buenos. La mayoría de los recuerdos más positivos desde que juego al fútbol son de Estudiantes, de haber obtenido una copa, compartido vestuario con grandes jugadores y técnicos. El ambiente que había siempre a la hora de practicar o comer un asado en las concentraciones hacían a la unión del grupo que permitió lograr grandes cosas".

UN SENTIMIENTO DIFÍCIL DE EXPLICAR

Habla como si hubiese atravesado una vida en el club, aunque fue un año con la camiseta de Estudiantes que lo vivió intensamente. Sánchez Prette habló del Pincha como una institución que no tiene comparación con otras y, a la hora de los elogios, aseguró que no alcanzan las palabras para describir el sentimiento que despierta: "Desde el momento que entras al predio, a la cancha con la gente con lo que significa ponerse la camiseta de Estudiantes, no tiene comparación con otros clubes. Es algo familiar. Más allá de jugar para un club representas a un montón de personas que no las conoces pero las ves en la calle y te dan fuerzas para dar lo mejor de vos. Es muy difícil de explicar lo que genera jugar en Estudiantes y pertenecer a la institución".

UN GRUPO UNIDO

Por todo lo logrado, el plantel del 2009 quedó y estará para siempre dentro de la historia del club. Dentro de ese grupo, Sánchez Prette fue uno de los intérpretes en una copa en la que le marcó dos goles en la fase de grupos al Cruzeiro en La Plata y dejó su granito de arena. Con compañeros y demás integrantes de un equipo humano excepcional, el actual hombre de Estudiantes de Río Cuarto recordó lo que le dejó cada uno de ellos: "Tengo recuerdos muy lindos, desde los técnicos hasta los utileros que siempre me trataron muy bien. A Astrada lo tuve poco y después vino Sabella que se acopló muy bien al grupo, los entrenamientos eran muy buenos; siempre buscaba la forma de encarar los partidos de acuerdo a las fallas que podían tener los rivales. Después cada práctica que hacíamos se veía la cantidad de buenos jugadores que había en el plantel. Cada vez que entrenabas era como estar jugando por los tres puntos, había mucho hambre de lograr cosas y todos querían estar. Eso fue lo que más unió al grupo, había una competencia sana y todos apoyaban".

EL INOLVIDABLE GOL EN EL CLÁSICO CONTRA GIMNASIA

Corría la tarde del 3 de abril de 2009. El reloj de un nuevo clásico platense marcaba los últimos segundos de los 6 minutos agregados por el juez. Estudiantes perdía 1-0, pero todavía quedaba tiempo para que Sánchez Prette quedara en la historia de los derbis de la ciudad. Tras un pelotazo largo de Angeleri, la pelota le quedaría al cordobés para definir cruzado, de zurda, y desatar el delirio de la gente albirroja con el empate agónico. La camiseta con el "24" iba por los aires mientras todos sus compañeros festejaban. Un día memorable para el ex futbolista pincharrata que aún hoy sigue viendo ese video sin poder creerlo: "Fue increíble. Justo me tocó a mi y aparte ese día habían ido a verme amigos que no eran hinchas de Estudiantes y cuando metí el gol se abrazaban con la gente y lloraban. Eso te da la magnitud de lo que es el clásico y lo que genera el club. Ver llorar a hinchas de otro club que no es el que estás jugando por un gol sobre la hora no tiene palabras. Es inolvidable. Cuando estoy en mi casa me pongo a ver videos en internet y, si bien pasaron varios años, no caigo todavía por cómo se dio el partido que ya terminaba, aparte le pegué mal porque si lo hacía bien no entraba. Después lo que fue ver a la gente gritando con el alma lo que fue el gol es inolvidable. Gracias a Dios me pasó a mi y me queda en el recuerdo, no tiene precio".

EL CARIÑO DE LA GENTE Y LOS MEJORES DESEOS PARA EL CLUB

"Soy un agradecido a la gente por más que no esté ahora en el club. Cuando me ven por la calle o en otro lugar siempre se acuerdan y me tratan bien. Desde el momento que llegué que me hicieron sentir como si fuera del club. Espero que se de otra vez que Estudiantes pueda ganar una copa importante para festejar porque la alegría de la gente es ver al equipo campeón. Ojalá ganen muchísimas cosas".

Axel Damian Padilla

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