Llegó la hora de la verdad. Llegó el día donde no hay mañana para nadie. Llegó el día donde Estudiantes comienza a alimentar aún más su sueño de estar en la definición de la Copa Binance. Llegó el día de los cuartos de final. Llegó el día en donde Estudiantes estará cara a cara con Argentinos Juniors en lo que será el primer "mata a mata" de la serie final del primer campeonato argentino. El encuentro, que será arbitrado por Fernando Echenique, se desarrollará desde las 19.15 en el Estadio Uno.
Estudiantes fue el mejor de la zona B, Argentinos accedió a esta instancia en el cuarto lugar de la zona A tras ganarle en la última fecha de la ronda regular a Unión de Santa Fe 2-1 en La Paternal. Con estos pergaminos, uno tiene más responsabilidades que otros, y claro que los pupilos de Ricardo Zielinski se ganaron su lugar por la gran campaña, al margen de lo que sucede con Boca y River, quienes también están dentro de los ochos mejores del campeonato.
El equipo pincha ya tiene una experiencia, con un sabor agridulce, de participar de los cuartos de final. La campaña anterior se quedó afuera de las semifinales tras perder por penales con Independiente en 1 y 57. Ahora llega una nueva chance y si bien el plantel cambió, las ansias de revanchas están a la flor de piel de un grupo de jugadores que desde la pretemporada en Uruguay se preparó para esto.
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El partido no será simple. Argentinos tiene una identidad clara desde que Gabriel Milito tomó el cargo de entrenador. El control del balón y atacar con mucha gente es su sello y más aún cuando actúa de visitante, donde lo que utiliza como arma letal son los espacios que dejan sus rivales. Y a partir de esto, Estudiantes no debe apartarse de su libreto, ni volverse loco por la "presión" que ejerza el público desde las tribunas. El equipo ya dio muestras de como debe manejarse ante necesidades extremas, un ejemplo fue el encuentro con Nacional de Uruguay por la Conmebol Libertadores, y a partir de ese convencimiento es que debe "tejer" el partido a su molde.
Ricardo Zielinski sabe lo que se juega en 90 minutos y por ello no especula, ni se guarda nada. Tiene sobre las mesa las mejores cartas para armar las tres líneas: defensa, medio y ataque.
Llegó la hora de la verdad. Llegó el día en que Estudiantes tiene por delante la gran oportunidad de demostrar por qué fue uno de los mejores del semestre y de la Copa.
